Sexo, violencia y publicidad
Cuatro horas de trabajo a un ritmo lentísimo por culpa de un debate; por culpa de un anuncio. Se trata de Dolce & Gabbana, que desde hace un tiempo ha apostado por unas campañas polémicas y transgresoras (al más puro estilo Benetton) debido a la violencia que las envuelve.
Algunas de las críticas son más comprensibles ya que se trata de una violencia más explicita y puede resultar difícil para algunas personas encontrar el sentido poético o estético como ocurrió en el Reino Unido hace un mes. Sin embargo la polémica de hoy me parece excesiva.
Por un lado se encuentra la posición del Instituto de la Mujer que alega que la postura, el sometimiento y los observadores de la foto que podéis observar arriba resultan violentos y pueden incitar a la violencia de género en la sociedad. Por otro lado yo opino que se trata de una muy buena, bonita y sugerente foto en la que hasta que no he escuchado la polémica ni se me había pasado por la cabeza la idea de la violencia, la imagen sólo me evoca sexo y sensualidad, y considero que la postura de la mujer muestra una disposición erótica muy provocativa y nada de sufrimiento. Considero que hay cosas mucho más importantes y urgentes que el Instituto de la Mujer pueda hacer en lugar de criticar anuncios como éste.
La polémica está servida.
Algunas de las críticas son más comprensibles ya que se trata de una violencia más explicita y puede resultar difícil para algunas personas encontrar el sentido poético o estético como ocurrió en el Reino Unido hace un mes. Sin embargo la polémica de hoy me parece excesiva.
Por un lado se encuentra la posición del Instituto de la Mujer que alega que la postura, el sometimiento y los observadores de la foto que podéis observar arriba resultan violentos y pueden incitar a la violencia de género en la sociedad. Por otro lado yo opino que se trata de una muy buena, bonita y sugerente foto en la que hasta que no he escuchado la polémica ni se me había pasado por la cabeza la idea de la violencia, la imagen sólo me evoca sexo y sensualidad, y considero que la postura de la mujer muestra una disposición erótica muy provocativa y nada de sufrimiento. Considero que hay cosas mucho más importantes y urgentes que el Instituto de la Mujer pueda hacer en lugar de criticar anuncios como éste.
La polémica está servida.