jueves, noviembre 24, 2005

Cambio de aires/happy bithday?



Qué vueltas da la vida!

Tras un extraño y no muy deseado regreso a Pamplona, yo me estaba tomando unas largas vacaciones sin tener ni idea de que hacer con mi vida y sin ningún plan de futuro. Despúes de terminar mi beca en Madrid no tenía ninguna obligación como ir a clases o al trabajo, así que me tomé mes y medio de vacaciones para leer y salir sin parar (es lo que hice). Por fin decidí centrarme y pensé estudiar el carné de conducir pero mis planes y mis vacaciones se truncaron: recibo una llamada telefónica en la que me decía que tenía que volver a trabajar en Madrid dos días después.

En Madrid me acoge mi amigo Nicolás, me alojo de ocupa en el piso en el que viví en verano. El trabajo es una mera sustitución unos días salteados, pero cada vez son más seguidos y llego a librar un día por semana. Por fin me informan de que en diciembre y en enero tendré que seguir currando (y mucho).

Mi situación se complica. No sé cuánto tiempo estaré en Madrid porque puede ser mucho, no sé si debería coger un piso o si no voy a estar aquí lo suficiente. Llega mi cumpleaños y es horrible porque cae en domingo y estoy currando y enfermo. Menos mal que los del piso me regalan The wall de Pink Floyd y así ya tengo otro gran disco original. Decido que en diciembre ya me iré a otra casa porque paso de estar siempre de ocupa en el mismo lugar; en el curro mis jefes me han dicho que en Navidad tengo que ir a trabajar. Por un lado estoy confuso, no sé qué va a ser de mi futuro, vivo en casa de otros, curro muchos días muchas horas y además de haberme perdido mi cumpleaños me pierdo la Navidad. Por otro lado voy a cobrar un pastón, estoy en la ciudad que quería estar y currando en lo que me gusta.

Conclusión: estoy descolocadísimo pero contento.

martes, noviembre 15, 2005

Concierto de Deluxe


(Este artículo fue escrito hace diez días pero por problemas con internet y que he tenido que venir a Madrid no lo he podido colgar aquí antes.)

Dolor de garganta y de cabeza, inicio de resfriado. No debería salir pero voy a la bajera con un litro de cerveza bajo el brazo “por si acaso”. Veo Ciudad de Dios y recibo una llamada al móvil con una proposición: concierto de Deluxe en Artsaia. Resultado: primera crítica de un concierto en el blog.

La apertura era a las 22:00h., a y media actuaban de teloneros, Smoking Kills, y nosotros entramos justo cuando Deluxe comenzó a tocar. Hubo media entrada más o menos, bastante gente en la primera zona pero la segunda barra prácticamente vacía. La banda estuvo muy correcta, sin errores, y poco a poco se fue entregando a un público bastante animado. El sonido en la sala fue bastante bueno salvo unos pequeños problemas al principio con la mezcla de las guitarras ya que una en alguna canción no se escuchaba casi; por otro lado los teclados en un primer momento llegaron casi a saturar y tenían los agudos un poco altos. El amigo Xoel interpretó a la perfección su papel, no se relacionó casi con el público ni falta que le hacía porque a base de buenas interpretaciones y con unos pocos gestos conseguía que los presentes le siguieran y meterse a todos en el bolsillo. A pesar de no hablar con la gente más que para presentar a la banda en dos ocasiones, se veía que el cantante disfrutaba tocando y que estaba contento con la respuesta del público. De hecho brindó su cubata con un grupo de la primera fila y hasta dio una púa a otro fan que se lo pidió. El concierto no fue muy largo pero Deluxe ofreció un buen número de bises. La selección de canciones fue muy variada pero cabe destacar algunos momentos fuertes como la perfecta y entregada interpretación de Bienvenido al final o cuando sonaron seguidas Que no y Los jóvenes mueren antes de tiempo. Sin embargo lo mejor se quedó para los bises: Xoel ofreció una versión de There is a light that never goes out de los Smiths sólo con su voz y su guitarra a la que siguió If things were to go wrong. El gran final del concierto consistió en una animada Three months of glory en la que intercalaron una parte de With or without you de U2.

En resumen, 15 euros bien invertidos a pesar de que hoy mi garganta se resiente y una digna primera reseña de un concierto en este blog.

jueves, noviembre 03, 2005

Revelaciones del verano


Buff! Esto de escribir en un blog es más difícil de lo que pensaba; no se me ocurre nada. Se ve que me falta práctica. Como no sabía qué poner he empezado a dar vueltas al coco y me he acordado de mi estancia en Madrid, de los colegas de allí y de los tropecientos discos que me compré. Entre todos esos discos hay muchos que ya sabía que estaban bien o que ya había escuchado, pero hay tres que me han sorprendido gratamente. Estas son las tres revelaciones del verano:
  1. Post de Björk: Este segundo disco de la islandesa está grabado en 1995. La producción es innovadora y está muy cuidada; en ocasiones puede sonar un poco viejo, pero en conjunto suena más nuevo que la mayoría de las cosas que se hacen ahora. Sobre ella, la voz de la cantante está medida al milímetro a pesar de lo cual no pierde nada de expresividad. Este disco me ha sorprendido mucho porque es lo primero que escucho de Björk y no sabía que era tan buena. Como curiosidad apuntar que es la islandesa que más joven ha terminado la carrera de piano hasta la fecha.
  2. Uh huh her de PJ Harvey: Última publicación de esta compositora que data de 2004. Soy un gran admirador de PJ Harvey pero, sinceramente, no esperaba un disco tan bueno. El motivo es que la trayectoria de esta artista parecía ir a peor y llevaba varios años sin publicar nada nuevo. En este disco regresa a una producción más sucia y poco convencional con extrañas mezclas de volúmenes muy contrastados. El trabajo se puede resumir en aparente simplicidad y mucha emotividad. Muy Recomendable.
  3. In-a-gadda-da-vida de Iron Butterfly: En 1968 surgió este disco que es uno de los mayores exponentes de la psicodelia. Lo cierto es que me lo compré porque estaba en la Fnac a 5 euros y me gustaba la canción mítica, sin más. La sorpresa llegó cuando descubrí que la famosa canción que da nombre al disco era la peor de todas. Una buena ración de teclados penetrantes y ritmos relajantes y enervantes alternados, ideal para acompañar con marihuana o LSD.