jueves, abril 08, 2010

Ese momento


A todos nos ha pasado, estoy seguro. Es un momento incómodo pero agradable al mismo tiempo. No sabes qué está pasando y te asustas porque no sabes si es real o es mentira.

Me refiero a cuando estás con un amigo o amiga que sólo es eso y, mientras te habla, te das cuenta de que te has quedado prendado por algún motivo. Estáis compartiendo un café, una cerveza, o pidiéndole un bolígrafo, cuando de pronto te fijas en los ojos que tiene o en sus labios, te viene una ráfaga de su olor y notas que se te acelera el corazón. El vello se te eriza, te pones nervioso, la otra persona se transforma y no la ves igual (hay ocasiones en las que hasta empiezas a imaginarla desnuda), no sabes qué decir y hasta puede que llegues casi a temblar o te salga una risita nerviosa. No me refiero a cuando en algún punto oculto de ti escondes unos sentimientos que no quieres reconocer ante ti mismo, sino a cuando te coge por sorpresa en un momento dado sin venir a cuento.

Cuando hay sentimiento previos te das cuenta de que esa persona te gusta de verdad desde hace mucho y te seguirá gustando al menos por una temporada. Pero si no es así, generalmente es una tontería que te puede durar un día o como mucho dos. No sé por qué se producirá, probablemente algún desequilibrio químico en nuestro traicionero cerebro pero te deja descolocado, aturdido y pensativo durante todo el día.

El problema de verdad, por lo menos en mi caso, es cuando tienes que volver a hablar con esa persona y actuar con naturalidad. Se me nota que estoy actuando de un modo extraño, creo que estoy siendo falso hacia esa persona y, aunque no culpable, si me siento como si hubiera cometido algún tipo de traición. Sé que suena raro pero es inevitable.

En fin, locuras cotidianas…

3 Comments:

Blogger angie said...

bueno, las locuras cotidianas molan...y aunque la gente lo niegue, a todos nos ha pasado.
si es cosa de un momento, es mejor dejarlo a un lado y esperar si pasa otra vez. si ya se vuelve a cosa de dos momentos, es cuando vienen los problemas, pero bueno, no hay por qué sentirse culpable, quien sabe si la otra persona también ha tenido uno de esos momentos y se siente igual. entonces no pasa nada.
yo creo que es el cerebro, que a veces se aburre y busca entretenimiento en materias que requieren activo pensamiento rotatorio.

10:06 a. m.  
Blogger Ripley said...

a todos nos ha pasado eso alguna vez, está dentro del descubrir cosas nuevas en otras personas, cosas por las que les veremos o valoraremos de otra manera o, en algunos casos, cosas por las que nos enamoraremos de alguien. es dificil saber cómo funciona el cerebro pero nuestro cuerpo es sabio.

4:29 p. m.  
Blogger Rick said...

Angie, nuestro cerebro se volverá loco a sí mismo. Aunque insisto en que estas locuras son algo que me gusta mucho a pesar de la perplejidad.

Ripley, me ha gustado lo de descubrir cosas nuevas en otras personas. Es verdad que las ves completamente diferentes.

4:38 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home